Las carillas son un tratamiento diseñado para mejorar la apariencia de los dientes. Consisten en la colocación de finas láminas del mejor material del mercado en la superficie frontal de los dientes, mejorando su color y forma. Además, las carillas pueden cerrar los espacios que se forman con el deterioro de las encías.

Este tratamiento es popular entre quienes desean mejorar la estética de su sonrisa, especialmente en lo que respecta al color, la forma y la alineación de los dientes. Sin embargo, no todas las personas son candidatas ideales para las carillas. Es necesario que un profesional evalúe cada caso para determinar si son adecuadas.

Aunque las carillas pueden mejorar la apariencia de los dientes afectados por problemas como la piorrea o la periodontitis, no son un tratamiento para curar estas enfermedades.

Por lo general, los pacientes que pueden optar por carillas son aquellos con una buena salud bucal. Es fundamental contar con dientes y encías saludables, así como con suficiente esmalte dental para asegurar una adecuada retención de las carillas.